¿De motivación cómo andas?. Claves para mantenerte en acción

Por Cris Schwander*

En estos tiempos de (¿post?) pandemia mucho se ha hablado acerca de que el líder debe reforzar más que nunca sus habilidades de escucha atenta, flexibilidad y empatía. Y todo eso es muy cierto, ya que estas cualidades son la columna vertebral del liderazgo actual.

Sin embargo hay un tema del que casi no se ha hablado y que considero clave en momentos como éste. Me refiero a la motivación y, más específicamente, a cómo permanecer motivado en un contexto de incertidumbre mundial y donde las noticias y las charlas cotidianas refuerzan esta sensación de que no sabemos cómo va a terminar todo.

Un estudio realizado con 190.000 personas y publicado por la revista Psychiatry Research nos confirma algo que sospechamos todos: que la pandemia ha erosionado la salud mental de millones de personas y que los problemas preponderantes son el insomnio (24% de los encuestados); el estrés postraumático (22%); la depresión (16%) y la ansiedad (15%). La investigación destaca que, a su vez, estos trastornos son entre 3 y 5 veces más frecuentes que antes de la pandemia, según las cifras de la Organización Mundial de la Salud.

Ante este escenario, el líder se enfrenta a una tarea muy desafiante e indispensable para mantener a flote a las organizaciones: generar confianza y credibilidad en el equipo, disipando el “letargo Covid” donde se mezclan estrés, miedo, ansiedad y apatía … y que en algunos casos también es una buena excusa para “hacer la plancha” hasta que todo pase. Por eso hoy la tarea primordial del líder es despertar (y mantener) el interés de su gente, reactivando esa “llama sagrada” que todos tenemos.

Ahora bien, ¿cómo se logra? La respuesta es dándonos cuenta, accionando y haciendo, porque para un líder este no es un momento de abulia ni de tibiezas. Porque la motivación, que se nutre del pensamiento y de la acción, es el motor en tiempos de crisis y es lo que nos va a permitir lograr la cooperación en el equipo, alinear propósitos, cumplir con los objetivos y, sobre todo, lograr resultados.

En el liderazgo, la motivación se compone de las llamadas “6 C” que son las siguientes:

Confianza: implica seguridad, entrega, convicción y es lo opuesto al miedo. Desde la confianza somos más receptivos, generosos y construimos relaciones genuinas. La confianza nos alienta y nos da ánimos. Nos da la sensación de que “juntos es mejor”.

Credibilidad: implica honestidad y armonía entre el decir-hacer. Tiene que ver con las competencias, con la capacidad de reconocer errores y también con aceptar que a veces uno no sabe algo. La credibilidad se construye cumpliendo con lo que se promete.

Compromiso: implica responsabilidad, voluntad y disciplina. Se demuestra involucrándonos de verdad y disipando nuestras dudas. Es, justamente, no temerle al compromiso evitando así la procrastinación.

Constancia: implica perseverancia, tesón y persistencia para no desistir ante los problemas. Es permanecer con el objetivo en mente aun cuando el entorno muestre todo lo contrario.

Cordialidad: implica afecto, respeto y sinceridad. Es muy importante para la armonía en la cotidianidad, nutriendo la colaboración, compartiendo la información y alejándonos de la mera (y dura) competencia. La cordialidad no es una “pose”, es alejarse de lo hostil y construir desde la amabilidad. Se cultiva con el reconocimiento y el agradecimiento.

Y dejo para lo último la “C” que considero clave: la C de Coraje.

Coraje: implica poner el corazón en acción y explorar nuestra capacidad de enfrentar una situación incierta. El líder necesita coraje para encarar conversaciones difíciles, para saber gestionar en un mundo V.I.C.A (volátil, incierto, complejo y ambiguo), para actuar aun cuando no puede controlar los resultados, y hasta para reconocerse vulnerable. El coraje cultiva la autoestima individual y de equipos, y es la herramienta fundamental para este momento de liderazgo donde sin motivación no hay resultados positivos posibles.

*Magister en Inteligencia Emocional y autora del libro Eso que quiero que me pase– Liderazgo para la Vida Cotidiana. El Emporio Ediciones.